Matías Paredes, de 26 años, volvía a su casa de la presentación de la camiseta de Alvarado cuando dos autos sin patente, con agentes arriba, lo persiguieron y terminaron con su vida. Su familia cree que buscaban al asesino del kiosquero.
Allí comenzaron los disparos que terminaron con la vida de Paredes. El fiscal Alejandro Pellegrinelli indicó que el auto en el que viajaba la víctima “no se encontró nada”, es decir, ninguno de los ocupantes tenía nada. Tampoco antecedentes.
Lo que dio a pensar que esto podría haber sido una persecución para poder encontrar al asesino del kiosquero que ocurrió en la zona. El sospechoso por el crimen de Cristian Velázquez es Cristian “Guachín” Monje, quien al momento del hecho llevaba puesta la camiseta de Alvarado.
El hecho ocurrió a la 1:30 del jueves a tres calles de Fortunato de la Plaza y Polonia, zona que quedó llena de vainas. La EcoSport comenzó a perseguir al Palio con tres agentes adentro, mientras que el Bora les cortó el paso con dos agentes.
Los efectivos estaban de civil y tampoco dieron la voz en alto. El auto recibió siete disparos. Cuando lograron detenerlos en Goñi y Caraza, a diez cuadras de donde comenzó todo, Paredes estaba herido con un disparo en la pierna, otro en el brazo, un roce en el cráneo y uno en la espalda, el cual le habría causado la muerte.
El fiscal agregó: “Mañana se va a producir el cotejo de las armas reglamentarias que fueron secuestradas -adelantó el investigador-, con eso y la autopsia vamos a determinar de dónde provinieron los disparos que le dieron muerte. Necesito hacer esa pericia para saber la pertenencia de esas armas“.
Por el momento, ninguno fue detenido por el momento. El fiscal espera las pericias balísticas para determinar si ordena su captura o no.