Argentina viene reclamando al organismo desde hace dos años que revea su política de sobrecargos.
El directorio Fondo Monetario Internacional (FMI) se reunirá esta tarde para tratar la posible eliminación de los sobrecargos a préstamos considerados excepcionales, como los que tiene la Argentina, al mantener un programa de facilidades extendidas con el organismo por u$s45.000 millones.
Según confirmaron fuentes del organismo a Télam, el directorio del organismo tratará hoy la “revisión de los saldos precautorios del Fondo”, de acuerdo con el calendario externo del organismo, donde la postura argentina será la eliminación total de esos sobrecargos.
Desde el equipo económico estiman que el país paga adicionales en recargos de intereses por cerca de u$s1.000 millones anuales a raíz del préstamos vigente con el FMI.
Durante la cumbre de presidentes del G20 realizada el 15 y 16 de noviembre pasado en Bali, Indonesia, los mandatarios volvieron a retomar en la agenda el tema de la revisión de los sobrecargos, y en el contexto de la continuidad de la guerra en Ucrania.
Allí mismo, la titular del Fondo, Kristalina Georgieva, se comprometió a analizarlo en el directorio en diciembre, durante la reunión que mantuvo con el presidente Alberto Fernández, una promesa que se materializaría hoy.
Por qué es importante la eliminación de los sobrecargos
Los sobrecargos que aplica el Fondo Monetario Internacional (FMI) pueden significar para países de ingresos medios como la Argentina, un encarecimiento equivalente a casi el doble de los intereses que se deben pagar por la deuda contraída con el organismo.
La Argentina viene reclamando al FMI desde hace dos años que revea su política de sobrecargos.
Esta política consiste en cobrar una tasa de intereses adicional a la que pesa sobre los préstamos que exceden la cuota de cada país, y que en el caso de la Argentina implican costos extra en intereses que entre este año y el próximo sumarán unos u$s4.000 millones.
La estructura de sobrecargos consiste en un cargo adicional de 200 puntos básicos sobre el saldo de la deuda pendiente de pago, cuando ésta supera el 187,5% de la cuota; y sube a 300 puntos básicos si los compromisos se mantienen por encima del 187,5% de la cuota después de 36 meses.
Como la Argentina accedió a un crédito de u$s5.000 millones, equivalente a un 1.000% de la cuota del país en el organismo, que asciende a casi u$s4.500 millones, y la tasa estándar del FMI para sus préstamos a los países de ingresos medios y altos es actualmente 3,64%, el interés que abona el país se convierte en 6,64%.
El encarecimiento se aceleró principalmente este año, dado que en marzo la tasa sin sobrecargos era de 1,25% y la que finalmente debía pagar la Argentina se ubicaba en 4,25%.
Esta cifra trepó 56,23% en los últimos ocho meses como consecuencia de la coyuntura financiera internacional.