El oficialismo intentará alcanzar acuerdos con los bloques de PRO, la UCR, Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal, para conseguir la media sanción al megaproyecto.
El Gobierno buscará alcanzar este lunes un acuerdo con los bloques dialoguistas para intentar darle media sanción esta semana a la Ley de Ómnibus, que contempla una delegación de facultades al Poder Ejecutivo, una amplia reforma del Estado y la privatización de unas 40 empresas públicas.
Si bien este domingo se dio a conocer la redacción del proyecto sin el paquete fiscal, no se descarta que en las próximas horas el oficialismo ceda también en el ítem de la delegación de facultades, algo muy cuestionado por buena parte de la oposición.
La sesión especial aún no fue convocada por La Libertad Avanza porque aguarda las conversaciones que se efectuarán con los bloques que firmaron con disidencia el dictamen de mayoría, pero de todos modos mantiene su decisión de sesionar el martes.
Por ese motivo, el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, tendrá como objetivo garantizar el apoyo de los bloques del PRO, la UCR, Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal, luego de que el ministro de Economía, Luis Caputo, anunciara la decisión de retirar del proyecto el paquete fiscal.
De esta manera, el proyecto ya no incluye el debate en torno a un aumento de las retenciones agropecuarias, un nuevo mecanismo de actualización de las jubilaciones desde abril, el blanqueo de capitales, los cambios en Impuesto a los Bienes Personales y la moratoria.
Tras esa decisión del Gobierno, este lunes se abrirá una nueva etapa de negociación para lograr la media sanción de esta iniciativa. El debate estará centrado en la delegación de facultades al Poder Ejecutivo en nueve materias, y las privatizaciones.
Por tratarse de la primera sesión que afrontará el oficialismo en la Cámara de Diputados, y por la cantidad de temáticas que incluye la ley, La Libertad Avanza deberá aceitar la estrategia para conseguir, primero, los 129 votos que necesita para habilitar el quórum, y luego para lograr los respaldos para sancionar artículos clave de la ley.
En ese contexto, en las últimas horas transcendió que el Gobierno estaría analizando acotar las delegaciones de facultades para que no abarque la emergencia en salud y previsional, y declarar sí la emergencia pública en materia económica, financiera, fiscal, seguridad, tarifaria, energética y administrativa. Todo puede cambiar en cuestión de horas.
Menem expresó este sábado su optimismo sobre que el proyecto pueda aprobarse, aunque recordó que su bloque sigue siendo “minoría en la cámara de Diputados” por lo que “dependerá de la voluntad” de todos los legisladores. “Nuestra intención como fuerza política es tratar la ley y trabajar lo antes posible”, agregó.
Sobre las privatizaciones, el despacho fija que en el caso de las empresas públicas Nucleoeléctrica, Banco Nación y Arsat se estableció que el Estado solamente puede realizar una privatización parcial, debiendo mantener el control de la empresa. En ese punto el radicalismo quiere que haya un compromiso para que el Gobierno envíe un proyecto por cada empresa que quiera privatizar, y Hacemos quiere eliminar de esa lista al Banco Nación, Arsat y Nucleoeléctrica.