¿Se viene el “dólar Coldplay”? El Gobierno encarece el acceso a los divisas para viajes y busca que se pague en dólar billete. Habrá tipo de cambio más alto para el pago a artistas internacionales.
Esta semana entrarán en vigencia las últimas medidas que buscan consolidar el nivel de reservas luego del aumento de más de USD 5.000 millones conseguido en septiembre tras la implementación del dólar soja. Sergio Massa y su equipo terminaron de delinear el nuevo conjunto de medidas cambiarias, que ahora apuntan a reducir los niveles de fuga. En otras palabras, volver más costosa la salida de divisas, especialmente para aquellos segmentos que no están directamente involucrados en la actividad productiva.
La primera decisión es que finalmente entrará en vigencia el dólar Qatar. Luego de algunas idas y vueltas, ya está definido que será más caro viajar al exterior. Hoy habrá reuniones que encabezará el secretario de Programación Económica, Gabriel Rubinstein, para definir cuál será el nuevo tipo de cambio turista.
Una de las opciones que se venía estudiando es la implementación de un tipo de cambio de $ 200, más el impuesto PAIS (30%) y una percepción en concepto de adelanto de Ganancias más acotada. Pero la idea es que pagar con tarjeta en el exterior, comprar pasajes y gastar en hoteles o cualquier otro rubro fuera del país arroje un tipo de cambio que incluso supere los $ 300.
Los bancos deberán facilitarles a los clientes que paguen directamente en dólares cuando llegue el resumen de cuenta de la tarjeta. El objetivo es que resulte más barato pagar directamente con dólar billete (o transferencia en moneda extranjera) que hacerlo en pesos al nuevo tipo de cambio para transacciones en el exterior. El problema siguen siendo las agencias de viaje, que al menos hasta ahora no tienen la opción de pago en dólares habilitada.
También se había definido que los pagos con tarjeta de servicios de streaming contratados en el exterior (y que por lo tanto se pagan en dólares) mantengan un tipo de cambio similar al actual. Son más de 1,3 millones de personas que pagan por estos servicios en moneda extranjera cuando esto no implica salir de la Argentina.