Un frustrado intento de mediación europea con Vladimir Putin alejó la posibilidad de frenar la guerra en Ucrania, donde el alcalde de Mariúpol, la ciudad a orillas del mar Negro devastada por los ataques rusos, denunció que más de 10 mil civiles murieron desde la invasión.
El alcalde Vadym Boychenko dijo a AP que los muertos “cubren las calles de la ciudad’’ y advirtió que el balance de víctimas podría ser de más de 20.000