El acto central fue en Dolores. Además, en diferentes escenarios hicieron homenajes al cumplirse 3 años del asesintado de Fernando Báez Sosa.
Este miércoles en los Tribunales de Dolores se realizó la decimotercera y última audiencia del juicio por el crimen de Fernando Báez Sosa, que coincidió con el tercer aniversario del asesinato ocurrido a la salida del boliche Le Brique en Villa Gesell. Hay homenajes en varios puntos del país para recordar al joven de 18 años.
Declararon los médicos Juan José Fenoglio y Jorge Rodolfo Velich, peritos por parte de la defensa, a cargo de Hugo Tomei. También rompieron el silencio los rugbiers Lucas Pertossi y Blas Cinalli.
Otros que brindaron su testimonio ayer fueron la mamá de Enzo Comelli, María Alejandra Guillén, el padre de Matías Benicelli, Héctor Eduardo Benicelli, y el de Luciano y Ciro Pertossi, Mauro Pertossi.
En el anfiteatro de Dolores también está presente el abogado defensor de la familia de la víctima, Fernando Burlando. La llegada de Graciela y Silvino es inminente.
En el homenaje, los presentes se pusieron de pie, encendieron las linternas de sus celulares y con la mano en el corazón hicieron un minuto de silencio para concientizar a todo el país sobre la violencia.
Luego del minuto de silencio, se hizo presentes el equipo de abogados y profesionales del derecho, encabezados por Fernando Burlando, que trabajan todos los días para hacer justicia por Fernando Báez Sosa y defender a su familia.
El Anfiteatro tiene capacidad para 2.500 personas y se encuentra repleto, no solo con vecinos de Dolores, sino con gente que se acercó desde distintos puntos de la provincia de Buenos Aires para acompañar a los padres de Báez Sosa, los principales oradores del acto.